Un ladrón se encuentra grave tras intentar robar una vivienda y ser atacado por un pitbull

El delincuente de 36 años saltó una tapia de una vivienda en el barrio Quinta Bouquiet, mientras los dueños se encontraban de vacaciones.

El hecho ocurrió en la ciudad de Cosquín, provincia de Córdoba. El ladrón fue rescatado por efectivos policiales.

Un ladrón está internado en grave estado tras ser atacado por dos perros pitbull cuando intentó entrar una casa durante la madrugada del domingo en la localidad cordobesa de Cosquín.

El sujeto de 36 años saltó desde una tapia de dos metros de altura en el barrio Quinta Bouquiet, mientras que los dueños del domicilio se encontraban en un evento de la ciudad de Córdoba.

En declaraciones, el comisario inspector Alberto Romero indicó que el presunto delincuente fue asistido por el servicio de emergencias para darle los primeros auxilios y derivarlo al Hospital Domingo Funes.

Por su parte, el director del nosocomio, Julio Sierra, informó que el paciente ingresó a la madrugada con lesiones severas, principalmente en el antebrazo izquierdo. “Es un estado clínico de gran deterioro. Se le hizo una cirugía reconstructiva en primera instancia y pasó a terapia intensiva con respirador y con drogas vasoactivas para mantener la función cardíaca”, señaló.

“Está muy comprometido el antebrazo, hubo arrancamiento de tejido, hay falta de sustancia, lesión neurológica, o sea del nervio, del brazo y de la arteria, así que estas lesiones son muy graves”, agregó el médico.

Según medios locales, tres ladrones aprovecharon la ausencia de los dueños de una vivienda para cometer el delito. Uno de los malvivientes saltó y fue agredido por los animales. Sus compañeros se escaparon tras oír los gritos de socorro de los vecinos.

La Policía llegó al lugar y realizó varias maniobras para tranquilizar a los perros y tratar de que suelten al delincuente, quien fue auxiliado y trasladado al hospital zonal, en el que quedó internado con graves lesiones en el antebrazo izquierdo.

Una vecina llamada Rosa contó que los propietarios de la casa tienen entre 27 y 34 años. La mujer explicó que «los policías querían entrar a la casa, pero los perros no los dejaban».

Al tratarse de un hecho de violación a la propiedad privada, los pitbull no fueron secuestrados por las autoridades y el lugar quedó bajo custodia debido al miedo que tenían los dueños de que sea nuevamente atacada.

La fiscalía de Cosquín, a cargo de de Paula Kelm, lleva adelante la investigación del caso.