La Asociación de Trabajadores de la Sanidad Argentina (ATSA) anunció este jueves que se encuentra en estado de alerta y convocó a un paro de 24 horas para el próximo 31 de julio, en rechazo a los crecientes rumores sobre un posible cierre del Hospital Naval, ubicado en la Ciudad de Buenos Aires.
La medida gremial busca visibilizar la situación de más de 500 trabajadores del sector, cuya estabilidad laboral estaría en riesgo si se concreta la clausura del emblemático establecimiento sanitario, que depende de la Armada Argentina.
Desde ATSA advirtieron que el cierre del hospital no solo implicaría la pérdida masiva de empleos, sino también un fuerte impacto en el sistema de salud pública, dado que el Hospital Naval brinda atención a miles de pacientes, incluidos jubilados, personal de las Fuerzas Armadas y civiles.
“La salud no se negocia y el trabajo tampoco. Exigimos claridad sobre el futuro del hospital y garantías para todos los trabajadores”, expresaron desde el gremio en un comunicado oficial.
Aunque por el momento no hay una confirmación oficial del Ministerio de Defensa o de la Armada sobre la decisión, el sindicato ya inició asambleas informativas y no descarta profundizar las medidas de fuerza si no obtiene respuestas en los próximos días.
La protesta del 31 de julio incluirá una movilización frente al hospital y la suspensión de tareas en varias dependencias del sistema de salud militar.